¿Es seguro aguantar las ganas de “hacer pipí”?
Tal vez fue el vaso de 50 onzas de refresco que bebió en el almuerzo o el Starbucks de tamaño “venti” que bebió en su camino al trabajo. Tal vez estaba tan ocupado respondiendo todos esos correos electrónicos de trabajo o quería esperar hasta que estuviera en casa porque no podía soportar la idea de usar un baño público. Cualquiera sea el caso, todos hemos estado allí: todos hemos llegado al punto en que hemos postergado ir al baño y ahora estamos en estado de emergencia haciendo el “baile del pipí” con la vejiga llena de orina, cruzando los dedos y las piernas con la esperanza de que las compuertas no se abran hasta que lleguemos al baño.
¿Puede ser una buena idea este hábito de esperar demasiado antes de encontrar un baño?
Bebemos, hacemos “pipí”, esto es importante. Pero la orina es mucho más que lo que tenemos que beber. Nuestros riñones filtran el exceso de agua y desechos de nuestra sangre y producen orina para eliminar los desechos y el agua adicional que nuestros cuerpos no necesitan.
Según el Instituto Nacional de Diabetes y Enfermedades Digestivas y del Riñón, una vejiga adulta sana puede contener entre una y media y dos tazas de orina antes de completar su capacidad. Cuando su vejiga está medio llena, los nervios de su vejiga se activan y envían señales a su cerebro para indicarle cuándo es el momento de vaciarla. Cuanto más se llena la vejiga, más fuerte es la sensación de orinar. Retener la orina significa que estás luchando constantemente contra estas señales para orinar.
Si bien no existe una pauta establecida sobre cuánto tiempo puede mantener su orina de manera segura, las investigaciones indican que las personas orinan en promedio seis o siete veces al día. La frecuencia urinaria generalmente depende de la edad, el tamaño de la vejiga, la ingesta de líquidos, la presencia de afecciones médicas, los tipos de líquidos consumidos y el uso de medicamentos.
Si tiene el hábito de aguantar las ganas de orinar por mucho tiempo, podría sufrir ciertos posibles efectos secundarios.
Infección de las vías urinarias (IU)
Ninguna investigación ha demostrado que retener orina provoque infecciones urinarias (IU), pero los médicos recomiendan evitar retener grandes cantidades de orina durante un período prolongado. Si no está vaciando regularmente su vejiga, es más probable que las bacterias en su orina se asienten y se multipliquen, lo que puede provocar una infección.
Distensión de la vejiga
Retener la orina puede hacer que la vejiga se distienda, lo que puede dificultar la contracción y provocar retención urinaria. Su vejiga es un músculo que se contrae al orinar. Cuando se distiende, con el transcurso del tiempo, las contracciones se vuelven menos fuertes y su cuerpo pierde las señales de que su vejiga necesita ser vaciada, lo que lleva a sufrir percances no deseados.
Lesión muscular del suelo pélvico
Retener la orina con frecuencia puede dañar los músculos del piso pélvico, específicamente el esfínter uretral, que mantiene la uretra cerrada y evita que la orina se filtre. Los músculos débiles del piso pélvico pueden dificultar que la vejiga retenga la orina, lo que puede provocar incontinencia.
Cálculos renales
Retener la orina puede causar la formación de cálculos renales. Los cálculos renales son masas duras de minerales que se desarrollan cuando los minerales en la orina concentrada se cristalizan. Esto sucede cuando su vejiga no se vacía por completo.
Los cálculos renales varían en tamaño, desde tan pequeños como un grano de arena hasta tan grandes como una pelota de golf. Los cálculos renales generalmente pasan a través de la uretra con la orina y pueden ser terriblemente dolorosos. Es importante beber mucho líquido para que su orina esté menos concentrada y vaciar su vejiga regularmente.
Como adulto sano, resistir ocasionalmente la necesidad de orinar no debería causar problemas, pero si se convierte en un hábito, podría haber daños graves en su vejiga y en su estado de salud general. No ignore las señales de advertencia de su cuerpo para vaciar su vejiga. ¡Responda al impulso y siga la corriente!
